ESTRATEGIA 3: TRIBUS URBANAS Y LA SUBCULTURA

TRIBUS URBANAS Y GRUPOS DE SUBCULTURA

OBJETIVO

Nos han educado para que pensemos y aceptemos que lo diferente es malo y peligroso para nuestro bienestar, nada puede estar más alejado de la verdad. Ha sido lo diferente lo que nos ha configurado a lo largo de nuestra historia, todo cambio ha sido generado por el hambre de progreso que siempre ha caracterizado al ser humano. En la actualidad, nuestra sociedad es un verdadero caleidoscopio de culturas y subgrupos que conforman sus propias tradiciones y hasta sus propios lenguajes, será deber del docente lograr que los estudiantes puedan dejar atrás sus prejuicios infundados y tener un acercamiento a estos grupos para respetarlos y tratar de entender el por qué de su estilo de vida. Esta es una estrategia que resulta fundamental si en verdad queremos enseñarles lo valioso que resulta aprender a convivir bien con todos generando tolerancia y armonía en la sociedad.

ETAPAS

1. DESENMASCARANDO PREJUICIOS: Hemos de retar a nuestros estudiantes que vean en sus miedos infundados hacia estos grupos solamente prejuicios que no son propiamente suyos sino que heredaron de una generación que solo podía ocupar el miedo frente a manifestaciones que no entendía. Será un compromiso con la verdad encontrar la forma de aprender valores y cosas buenas de estos grupos urbanos para promover un diálogo que resulte en una sociedad más respetuosa e inclusiva para todos. Será un compromiso fuerte con la defensa de la libertad de cada uno, siempre y cuando no irrespete la libertad de los demás.

2. IDENTIFICAR VALORES HUMANOS EN ESAS TRIBUS: El primer paso es aceptar y tolerar a los que deciden ser parte de estos grupos, el siguiente y más significativo es encontrar valores humanos e importantes en ellos. Debemos saber apreciar el sentido de solidaridad que ellos manifiestan, así como la empatía natural que sienten hacia todas las cosas vivas. También debemos reconocer que viven de manera formidable la valentía y la autenticidad porque se enfrentan con dignidad todos los días a marginación social pero lo prefieren a traicionarse interiormente. Generalmente manifiestan una apertura de mente y una tolerancia hacia todos los estilos de vida, absteniéndose de juzgar a otros por sus posturas de vida. Lograr que nuestros estudiantes valoren todo esto será un significativo avance en el pensar crítico.

3. TENER CONTACTO REAL CON ESTAS TRIBUS: No hay nada mejor que lograr un acercamiento con personas de carne y hueso que pertenecen a estas tribus urbanas, con dicho acercamiento nos daremos cuenta que tienen miedos y sueños igual que nosotros y que sus aspiraciones no son muy diferentes a las nuestras porque en realidad ellos también están buscando, a su modo, ser felices o por lo menos no tan infelices. Es fácil dejarse llevar por opiniones malintencionadas en contra de ellos o por lo que se dice en un periódico o una novela, pero si nos damos la oportunidad de escucharlos directamente a ellos muy difícilmente vamos a dejar que nos engañen otros que no se han atrevido a hacerlo. Esta es una labor noble que también se hace necesario lograr con nuestros estudiantes.

OBSERVACIONES

Es muy entendible que frente a patrones de vida tan diferentes y desafiantes la primera reacción casi natural sea el rechazo autodefensivo, pero no podemos permitir que esa sea la última palabra que nuestros estudiantes tengan respecto de estos grupos que, hoy por hoy, son la cara oculta de nuestras sociedades. El verdadero pensamiento crítico se ubica justo al medio de dos extremos enfermizos: rechazarlos por prejuicio y hacer apología a ultranza de todo lo que promueven. Como decía el sabio Aristóteles "el punto medio es la verdadera virtud humana". Así que acercarnos a estos grupos con una mente abierta para conocerlos es la mejor señal de alguien que piensa de modo crítico.

Todas las tribus urbanas y de subcultura o contracultura son grupos que han venido para quedarse, no se van a ir a ninguna parte y no le hacemos ningún bien a la sociedad si cerramos los ojos y los maldecimos interiormente solo porque nos da mucho miedo que algo de sus raras enfermedades se nos contagie. Hay que hacer pensar a los estudiantes una dinámica que rompa esquemas muertos y coloque voz en los rostros de estos hermanos que se han acostumbrado a vivir en la penumbra.